La forma de construir está cambiando.
Y tiende a transformarse aún más a medida que surgen nuevos recursos tecnológicos.
La tecnología está cada vez más presente en la construcción civil, y con su ayuda, el proceso constructivo tiende a parecerse al de una fábrica de automóviles: con el proyecto ya definido, el montaje se realizará a partir de materiales prefabricados. Las herramientas para ello ya existen.
Un gran ejemplo es la impresora 3D, que con su potencial demuestra una posibilidad de construcción mucho más rápida, eficiente y económica.
Planificación
En la fase de planificación, ya existen diversas herramientas disponibles. La realidad aumentada puede ayudar a visualizar el proyecto en el entorno real. Asimismo, el BIM (Modelado de Información de la Construcción) permite crear modelos virtuales de una edificación, lo que facilita un mejor análisis y la optimización de recursos y procesos. Además, el uso de Big Data puede apoyar decisiones más inteligentes sobre dónde construir, qué materiales utilizar y otros factores, con base en grandes volúmenes de datos analizados.
Construcción
Durante la ejecución de la obra, el uso de drones ya es común. Con ellos se pueden visualizar zonas de difícil acceso y monitorear el avance de las obras en tiempo real.
Otro recurso tecnológico con gran potencial de transformación es la inteligencia artificial. Ya existen investigaciones sobre robots autónomos capaces de manipular materiales y montar estructuras con gran precisión, como el In situ Fabricator, desarrollado por investigadores suizos.
Junto con estas tecnologías están los edificios inteligentes, que requieren adaptaciones durante la construcción, como la instalación de sensores en lugares estratégicos. También contribuyen a esta transformación el desarrollo de nuevos materiales, como aquellos que ayudan a controlar la temperatura de los ambientes y el uso de materiales sostenibles.
Saber utilizar la tecnología a favor del negocio significa estar a la vanguardia del mercado, donde el objetivo es construir de manera rápida, con menor costo, buena calidad y satisfacción del cliente.
La tecnología puede asistir y transformar el proceso de construcción, y contribuir al aumento de la calidad de vida de forma sostenible, adaptándose a las necesidades de la población.
Referencias: Institution of Civil Engineers; G1; Raise the Bar for Engineering; DFAB.
Artículo original